Inmobiliaria del Sur (Insur) obtuvo un beneficio neto de 10,1 millones de euros en 2018, lo que supone más que duplicar (+141,6%) el del ejercicio precedente, gracias a la “positiva contribución” de todas las áreas de negocio y a la “aceleración” de la de construcción y venta de viviendas, según informó la empresa.
La cifra de negocio de la inmobiliaria se disparó un 42,3% el pasado año, hasta sumar 120,3 millones de euros, importe en su mayor parte procedente de este negocio promotor.
En concreto, la actividad de promoción reportó ingresos de 62,9 millones, un 36,6% más que 2017. La firma indicó que la mayoría de estas entregas de llaves tuvo lugar en la última parte del ejercicio.
Insur destaca que la “aceleración” que presenta su actividad promotora tiene también reflejo en la cartera de viviendas prevendidas, que a cierre del año se situaba en 197,5 millones de euros. Este importe es un 45,9% superior al del pasado año e incluye tanto las promociones propias como las que desarrolla con socios.
A la conclusión de 2018, la inmobiliaria que preside Ricardo Pumar tenía 1.966 viviendas en desarrollo, de las que 787 estaban ya en construcción y otras 460, comercializadas.
Además, durante el pasado año, la inmobiliaria invirtió 28,2 millones de euros en comprar suelos para construir viviendas, terrenos que permitirán levantar 521unidades. De ellas, 101 corresponden a promociones propias y otras 420 a los proyectos que desarrolla junto con socios.
De su lado, la rama de alquiler de patrimonio facturó 12,1 millones de euros en 2018, un 15,9% más, gracias “al impulso dado a la diversificación geográfica y al esfuerzo de comercialización”. Durante el pasado año firmó contratos de arrendamiento sobre 14.107 metros cuadrados de superficie.
En cuanto a las actividades de construcción y gestión, la primera reportó 41,1 millones de euros, un 60,5% más que un año antes, y la segunda otros 4,3 millones (+72%).
De esta forma, Insur disparó un 58,1% su beneficio bruto de explotación (Ebitda), hasta situarlo en 21,5 millones de euros (15,4 millones en caso de descontar los resultados por rotación de activos).
Ante estos resultados, la inmobiliaria prevé también más que doblar (+140%) el dividendo que reparte a los accionistas.
RECORTE Y DIVERSIFICACIÓN DE DEUDA.
En el capítulo financiero, Insur logró recortar en un 8,2% su deuda financiera neta, hasta los 163 millones de euros, fruto de la “estrategia de control de endeudamiento” que asegura mantener la firma.
De este modo, la ratio que arroja la comparación entre la deuda y el valor de los activos de la inmobiliaria (‘loan to value’) es del 40,7%, un punto menos respecto al 41,9% que presentaba al cierre de 2017.
Esta tasa desciende hasta el 36,2% si se ajusta teniendo en cuenta tanto el valor bruto de los activos (GAV) como la deuda financiera neta de las sociedades que integran por método de participación.
En paralelo, Insur, en el marco de su política de diversificación de sus fuentes de financiación, lanzó a través del MARF una emisión de pagarés de un máximo de 35 millones de euros a un año.